El menor condenado por el asesinato de Ariel Di Meglio fue protagonista de un insólito intento de fuga, este lunes por la mañana cuando se encontraba en Tribunales para una audiencia psicológica. Se tiró al vacío desde el tercer piso del edificio de Brown y Tucumán, aunque no concretó su escape y fue internado en el Hospital Interzonal General de Agudos (Higa).
En abril de 2012 el menor ya había protagonizado una fuga cinematográfica: custodiado por policías, tomó a una empleada y, protegiéndose con ella como escudo, se escapó de los policías y corrió por las escaleras ocho pisos hasta alcanzar la salida. Ya se había fugado cuando fue detenido y era trasladado a La Plata: pidió ir al baño y cuando sus guardias se distrajeron se fugó.
En esta oportunidad, la fuga del joven delincuente resultó infructuosa: el joven cayó y se rompió una pierna. Arrastrándose como pudo, fue hasta el estacionamiento y cuando intentó robarse un auto para escaparse fue detenido.
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